La dinastía Románov (Рома́нов) era una dinastía rusa establecida en Moscú desde el siglo XVII que accedió al trono en 1613 con la coronación de Miguel I, hijo del patriarca Filareto (primo de Teodoro I de Rusia), y que rigió el país hasta que la Revolución de Febrero de 1917 obligó al zar Nicolás II a abdicar.